No me regales cosas,
regálame momentos.
Las cosas tienen un precio,
y algunas son de mucho valor;
pero los buenos momentos no tienen precio.
Se recuerdan para siempre,
se funden con el alma
y trascienden:
la soledad, el silencio y el olvido.
Hazme saber tus intereses
y disfrutemos juntos,
de esos buenos momentos
que son tallados como con cincel en el corazón.
Me gusta la idea de regalar momentos en lugar de objetos.
😉
Tiempo de calidad, sin prisa ni ansiedad, sólo eso..bello pensamiento mi hijo, Dios te bendiga, te amo.
Gracias, mi hermosa madre 😉 BESOTES