Mientes,
paseas tu mirada entre la oscura noche;
las tinieblas se confunden.
La silueta de un espíritu angustiado
se cruza entre tus pasos.
Busco algo de verdad entre la brisa que te persigue;
ese aroma que dejas cuando avanzas,
siempre tan deprisa.
¿Por qué mientes?
Ya no distingues…
Te has enredado en tu propio lazo,
caíste en tu propia trampa.
Y yo todo un tonto
que me hice un vicio de las caricias de tus manos;
que respondí a tu voz
como oveja que es llevada al matadero.
Etiqueta: engaño
¡Que alguien le diga algo!
La muerte esperaba paciente en una de las esquinas de la calle. Desde las ventanas algunos vecinos señalaban a un hombre que caminaba en esa dirección y murmuraban entre ellos de su suerte.
ㅡ¡Que alguien le diga algo! ¿Qué no ven como anda? ㅡdijo la señora. Sigue leyendo “¡Que alguien le diga algo!”